Es indudable que el paso del tiempo produce estragos en nuestro cuerpo, unas secuelas que unas veces, llevamos mejor que otras. este es el caso de la vejiga que, mientras envejecemos, se va volviendo menos elástica y con ello provoca que tengamos más ganas de orinar.
Otra de las consecuencias de cumplir años es que nuestro suelo pélvico se va debilitando. Esto provoca la pérdida de control sobre la vejiga o incluso dificulta el vaciado completo de la misma, situaciones que nos pueden llevar a padecer incontinencia urinaria. A los hombres se les suma una situación y es que el agrandamiento de la próstata podría provocar también dificultad para vaciar la vejiga e incontinencia urinaria.
Y ante estas situaciones completamente normales ¿Qué podemos hacer? ¿Es posible prevenir de alguna manera las pérdidas de orina?
Pues sí, no se puede luchar contra el paso del tiempo pero si que se puede hacer que este sea menos acusado con las siguientes pautas:
Practicar los ejercicios de Kegel de forma regular puede fortalecer los músculos pélvicos.
Acudir al baño de forma regular y no aguantar las ganas de miccionar.
Mantener un peso adecuado con nuestra complexión
Evitar alimentos o bebidas que irriten nuestra vejiga, tales como el café, el alcohol o las bebidas gaseosas.
No fumar. El tabaco es uno de los mayores factores de riesgo para enfermedades como el cáncer de vejiga ya que es a través de la orina por donde expulsamos sus sustancias tóxicas.
Llevar una alimentación adecuada que, además de permitir que estemos en un peso adecuado, evite el estreñimiento. Los problemas de tránsito intestinal son otro de los factores de riesgo de la incontinencia urinaria.
Finalmente y ante los primeros síntomas hay que acudir al especialista para que nos haga un examen y una valoración exhaustiva. De esta forma podremos ponerle solución a las pérdidas de orina y además conocer su origen ya que podría ser consecuencia de una patología más grave que el simple paso del tiempo.
Equipo ICUA