Hasta el momento el cáncer de próstata agresivo y resistente a castración se puede tratar mediante los taxanos (medicamentos antineoplásicos que impiden el crecimiento celular al impedir la división de las células) y los tratamientos hormonales. En la actualidad no existen estudios que asesoren sobre que tratamiento es el mas adecuado para cada perfil del paciente y este estudio que ha visto recientemente la luz, puede mediante una prueba de sangre determinar qué tratamiento aporta más supervivencia a cada paciente. En la investigación han participado investigadores ingleses, italianos y de nuestro país, del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y ha sido publicada en European Urology.
Los resultados de la investigación han mostrado que aquellos pacientes con cáncer de próstata resistente a castración, con un número estable y normal de copias del gen receptor de andrógenos en sangre, tienen mayor supervivencia (un 50 por ciento más y con una media de 24 meses) y menor riesgo de desarrollo del cáncer cuando se tratan con abiraterona o enzalutamida. En cambio, aquellos que tienen más copias del gen receptor de andrógenos responden mejor a docetaxel, unos nueve meses más que cuando son tratados con abiraterona o enzalutamida.
La parte del estudio realizada en nuestro país y coordinada por el CNIO ha contado con la participación de 112 pacientes, de los 239 participantes. Asímismo estos pacientes españoles pertenecen a 13 centros diferentes de nuestro país que en la actualidad forman parte de la plataforma PROCURE, una red de centros que trata de crear colecciones de muestras biológicas de pacientes con cáncer de próstata avanzado que sirvan para el desarrollo de estudios a nivel europeo.
Este podría ser el primer biomarcador que determine cuál es el mejor tratamiento para cada paciente. De la misma forma sería de utilidad para desarrollar nuevas vías que permitan tratar a aquellos pacientes con cáncer resistente a los tratamientos actuales. Con un sencillo análisis de sangre, que es la biopsia liquida, se evitan pruebas más invasivas, costosas y molestas para el paciente. Según los portavoces esta prueba consiste en determinar la fracción de ADN tumoral presente en el ADN libre en la sangre. Con esta fracción se calcula el numero de copias del gen receptor de andrógemos, un hecho que permite decidir la mejor opción de tratamiento.
Los expertos explican que se deben realizar más investigaciones para confirmar de forma más exhaustiva los resultados obtenidos.
Si deseas conocer cómo son las pruebas actuales para diagnosticar el cáncer de próstata, puedes hacerlo mediante el siguiente link de nuestra web:
https://www.icua.es/urologia-avanzada/cancer-de-prostata/
Cuando el cáncer requiere ser intervenido de forma quirúrgica, la cirugía robótica se perfila como la tecnica más segura para el paciente. Descubre sus ventajas sobre la cirugía abierta:
http://www.icirugiarobotica.com/procedimientos-urologia/cirugia-robotica-prostata/
Equipo ICUA