Una revisión de artículos ha intentado desvelar si el consumo de energía y la actividad física de los pacientes está relacionada con la aparición de cálculos renales. Los datos analizados procedentes de diferentes centros como por ejemplo el Hospital Columbus-Gemelli de la Universidad del Sagrado Corazón en Roma, relaciona una mayor actividad física y un mayor consumo energético con un menor riesgo de cálculos. Los expertos determinan que se desconoce si esta asociación podría reproducirse en otras poblaciones de estudio tras tener en cuenta el estilo de vida y los factores dietéticos de los pacientes.
Para llevar a cabo el estudio se analizaron los datos de tres cohortes prospectivos grandes, el Estudio de Seguimiento de Profesionales de la Salud (HPFS) y los Estudios de Salud de Enfermeras I y II (NHS). La información obtenida fue recolectada a través de cuestionarios bienales validados y se utilizaron varios parámetros ajustados por edad, raza, IMC, comorbilidades, medicamentos, uso de suplementos de calcio, ingesta de líquidos y nutrientes.
El análisis incluyó a 215,133 pacientes durante veinte años de seguimiento. Al finalizar este periodo 5,355 pacientes tuvieron casos incidentes de cálculos renales. Los niveles más altos de actividad física, ajustados por edad, se asociaron con un menor riesgo de cálculos renales en mujeres pero no en los hombres. Sin embargo, tras el ajuste multivariado no hubo una asociación notable entre la actividad física y el riesgo de cálculos renales y el consumo de energía, en cualquier caso, no se asoció con el riesgo de cálculos.
Como conclusión el estudio sugiere que en los tres cohortes prospectivos, no hubo asociaciones independientes entre la actividad física, el consumo de energía y la incidencia de cálculos renales sintomáticos.
Si deseas conocer datos más concretos sobre el estudio puedes hacerlo mediante el siguiente link: estudiohttps://www.urotoday.com/recent-abstracts/endourology-urolithiasis/stone-disease/75879-physical-activity-energy-intake-and-the-risk-of-incident-kidney-stones-abstract.amp.html
En cualquier caso si que hay estudios que evidencian que el estilo de vida, especialmente la ingesta de determinados alimentos y los malos hábitos, además de la predisposición que tenga el individuo puede favorecer la aparición de esta patología. A continuación os dejamos un enlace de nuestra web con recomendaciones nutricionales preventivas: https://www.icua.es/calculos-renales-laser-holmio/alimentacion-veraniega-y-calculos-renales/
Equipo ICUA