Una de las preguntas más frecuentes tras el parto es cuándo la mujer puede reincorporarse a su rutina de ejercicio sin lesionar su suelo pélvico. El embarazo supone una agresión natural de la zona abdominal de la mujer. El peso y la presión ejercida por el feto en el vientre de la madre, muchas veces da origen a los tan conocidos prolapsos pélvicos y sus correspondientes pérdidas de orina. Estos prolapsos son más normales cuantos más embarazos haya tenido la mujer.
Ejercicios como los de Kegel, antes y durante el embarazo, permiten tener tono en la zona pélvica y que tras el parto estos problemas se minimicen. En general hacer deporte es positivo en cualquier estado de la mujer, ya sea embarazada o tras el parto con la finalidad de recuperar el tono físico.
Cada mujer es un mundo y no existen reglas generales en cuanto recomendación para la realización de deporte tras el parto. En lo que sí que se ponen de acuerdo los especialistas es que durante la cuarentena, no se deben realizar ejercicios intensos ya que es en esta etapa cuando la mujer se encuentra más vulnerable y podría provocarse incontinencia urinaria. Pasado este periodo lo ideal es que se vaya realizando deporte de forma gradual y siempre teniendo en cuenta las condiciones físicas anteriores de la mujer.
Nunca se debe forzar la máquina ni elevar las expectativas convirtiéndolas en irreales ya que se podrían provocar daños irreparables en el cuerpo, que en estos momentos se encuentra muy delicado. Si antes del embarazo la mujer corría media hora a diario, ahora lo ideal será que comience con un paseo y que más delante de paso a la marcha.
Ejercicio aeróbico suave, la marcha, los estiramientos, yoga o pilates, son algunos de los ejemplos de ejercicios indicados para comenzar de nuevo en la rutina del deporte. Los ejercicios de Kegel en esta etapa siguen siendo indicados, ya que bien hechos nunca supondrán un peligro para el suelo pélvico de la mujer.
En general, no se trata de recuperar la figura de antes del embarazo de manera rápida. Se trata de hacerlo de forma saludable. Es por ello que en caso de duda y para valorar su suelo pélvico, lo mejor será que la mujer acuda a su urólogo. Este le recomendará el mejor tratamiento y tipo de ejercicios.
Equipo ICUA