Según las estadísticas, los pacientes con diabetes y problemas renales tiene diez veces más riesgo de mortalidad que aquellos pacientes diabéticos que no tienen problemas renales. Por otro lado, la diabetes es una de las causas de enfermedad renal avanzada en nuestro país, por lo que el manejo de ambas enfermedades deben ir de la mano.
La combinación de las dos patologías, según el Jefe del Servicio de Nefrología del Hospital Clínico Universitario de Valencia, es altamente peligroso y es por ello que cada vez se le da mas visibilidad a este tándem, siendo protagonista próximamente de VI Foro de Formación en Diabetes de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia que se celebra el próximo mes de septiembre.
Según el experto cada vez tiene más relevancia la unión de estas dos patologías, permitiendo que se desarrollen avances en sus tratamientos y especialmente en la prevención. El experto explica tambien que un mal control de la diabetes y el infradiagnóstico de la enfermedad favorece las aparición de complicaciones como la nefropatía y la retinopatía, ademas de complicaciones macrovasculares como el ictus o el infarto. En general todos estos factores y otros problemas como la hipertensión arterial y el sobrepeso u obesidad, permiten que la enfermedad renal progrese de manera notable en los pacientes. En este sentido se debe resaltar que en nuestro país el 24 por ciento de los pacientes con insuficiencia renal requieren de trasplante o bien de diálisis por lo que el manejo adecuado de la diabetes se hace indispensable para evitar males mayores.
Equipo ICUA