- Se estima que en España hay unos 800.000 pacientes anticoagulados de los cuales más del 50 % padecen HBP
- Con la cirugía prostática con Láser Verde existe un mínimo riesgo de sangrado durante la operación, con una tasa de transfusión sanguínea inferior al 1%
En España aproximadamente unas 800.000 personas siguen tratamiento con anticoagulantes. De todas ellas el 56% son hombres con una media de edad de 69 años. Curiosamente es a partir de esta edad cuando los hombres presentan síntomas de hiperplasia benigna de próstata (HBP).
Uno de los síntomas de HBP es la hematuria o la presencia de sangre en la orina y hay que tener en cuenta el especial cuidado que deben tener este tipo de pacientes con cualquier hemorragia por mínima que sea, ya que la anticoagulación hace que el sangrado de cualquier origen sea más difícil de controlar.
Según el Dr. Fernando Gómez Sancha, Director del Instituto de Cirugía Urológica Avanzada de la Clínica CEMTRO de Madrid, muchas veces el sangrado de origen urinario se debe en pacientes anticoagulados al exceso de dosis de medicación anticoagulante, sin encontrar ninguna causa aparente. En otras ocasiones, sin embargo, la HBP puede presentarse con hematuria, suponiendo un problema importante para pacientes anticoagulados, que pueden sangrar excesivamente.
La próstata es un órgano muy vascularizado, y puede sangrar fácilmente en pacientes sometidos a tratamiento anticoagulante cuando hay HBP, o por la presencia de un cálculo en la vejiga o una infección urinaria.
Antiguamente, los tratamientos quirúrgicos clásicos de la HBP, tanto la cirugía abierta como la resección transuretral de próstata acarreaban un riesgo muy elevado de sangrado en pacientes normales, tanto durante la cirugía como en el postoperatorio inmediato e incluso durante las semanas posteriores a la misma. El elevado riesgo que suponía operar a pacientes sometidos a tratamiento anticoagulante muchas veces hacía que se descartara este tipo de operación, condenándolos a tener que sufrir síntomas urinarios muy molestos o incluso a llevar sonda vesical de por vida.
“Actualmente, debido al aumento de la esperanza de vida, cada vez hay más hombres mayores de 60 años con HBP que toman medicación anticoagulante, y el 30-35% de los hombres que operamos de HBP están sometidos a algún tratamiento anticoagulante”, nos dice el Dr. Gómez Sancha.
El Dr. Gómez Sancha introdujo la vaporización prostática con láser verde en España en el año 2003, que permite operar a pacientes anticoagulados a dosis terapéuticas sin necesidad de suspender el tratamiento.
La coagulación que proporciona el láser verde es extremadamente fiable, y regularmente operamos a pacientes anticoagulados sin cambiar su tratamiento. Hoy sabemos que suspender los antiagregantes plaquetarios o los anticoagulantes orales antes de la cirugía supone un riesgo mayor de lo que pensábamos para los pacientes, y con este láser podemos operarles perfectamente.
Con el fin de mejorar los resultados de la cirugía con láser verde, en 2009 el Dr. Gómez Sancha desarrolló y publicó por primera vez una nueva técnica, la enucleación prostática con láser verde. Ésta permite desprender el adenoma de la cápsula prostática en su totalidad, volcándolo hacia la vejiga de la orina para posteriormente extraer todo el tejido adenomatoso mediante un morcelador que lo fragmenta y lo aspira. La intervención se realiza por vía endoscópica, sin incisiones, y las intervenciones no duran más de una hora con una estancia hospitalaria media de un día. Al eliminar el adenoma por completo se evitan intervenciones futuras, algo que complicaría mucho la situación en pacientes mayores, anticoagulados y con enfermedades concomitantes. Una de las principales ventajas es que existe un mínimo sangrado durante la operación, por lo que la tasa de transfusión sanguínea es menor del 1% en pacientes anticoagulados. Otra ventaja muy importante es que esta técnica permite tratar próstatas de gran tamaño, ya que la vaporización clásica con láser verde tenía limitaciones a la hora de tratar pacientes con próstatas grandes.
La técnica de enucleación prostática con láser verde también permite al especialista enviar el tejido obtenido para realizar a posteriori un análisis histológico, lo que permite descartar la presencia de cáncer de próstata, que con la técnica de vaporización con láser no era posible, porque el tejido adenomatoso se destruía.