Practicar ejercicio de forma regular es un acierto seguro para prevenir muchísimas enfermedades, diversas patologías entre las que se incluye el cáncer de próstata.
Esta afirmación se deriva de muchos estudios que indican que la práctica deportiva podría prevenir el cáncer de próstata o incluso frenar el avance de la enfermedad cuando ya es inevitable. Estos estudios no indican que el deporte sea un milagro, simplemente que puede – mediante diferentes procesos hormonales- frenar ese desarrollo tumoral.
Ejercicio como freno del crecimiento tumoral
Uno de esos trabajos que ha intentado averiguar las bondades del deporte frente al cáncer de próstata ha sido el publicado el pasado mes de noviembre en la revista Prostate Cancer and Prostate Diseases.
El estudio realizado en conjunto por diferentes departamentos de la Universidad Edith Cowan, en Australia, ha aunado resultados de otras investigaciones para finalmente llegar a la conclusión de que aquellos hombres con cáncer de próstata metastásico resistente a castración que practican deporte aeróbico durante varios meses consiguen frenar el crecimiento del tumor.
Para llegar a esta conclusión también evaluaron los niveles de mioquinas en suero, antes y después del ejercicio, y además se analizó el efecto supresor de ese suero aplicándolo a una línea celular del cáncer de próstata. Las pruebas fueron realizadas con nueve participantes con cáncer de próstata metastásico con edad (= 67,8 ± 10,1 años) y un tiempo de diagnóstico del cáncer 36,2 ± 22,5 meses.
Estos participantes realizaron ejercicio durante 34 minutos en una sesión de alta intensidad cicloergómetro (bicicleta estática) y se les tomó una muestra de sangre antes y después del ejercicio. Como conclusión de la investigación se pudo determinar que con la práctica deportiva se segrega un mayor número de mioquinas, unas proteínas capaces de inhibir el crecimiento tumoral.
Es por ello que se recomendaría a los pacientes con un pronóstico de cáncer de próstata metastásico resistente a castración realizar deporte intenso para poder así mejorar en calidad de vida y frenar el avance de la enfermedad.
Este artículo muestra esta notable ventaja del deporte para mejorar el pronóstico pero ¿qué indica el último estudio publicado relacionado con el deporte?
Deporte, deterioro cognitivo y terapia de privación de andrógenos
Otra de las preocupaciones de los especialistas a la hora de recomendar un tratamiento son las posibles secuelas o consecuencias que puedan dejar en el paciente. Este es el centro de muchas de las investigaciones clínicas, que tratan de desvelar esas posibles consecuencias y con ello prevenir males mayores.
El último estudio ha sido realizado por el Departamento de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento del Memorial Sloan Kettering, en Estados Unidos y ha sido publicado en International journal of behavioral medicine.
La finalidad de la investigación era determinar de qué forma afecta la terapia de privación de andrógenos a nivel cognitivo a los pacientes mayores con cáncer de próstata y su relación con la práctica deportiva.
Para llevarlo a cabo se analizaron los datos de hombres de 65 o más años con cáncer de próstata que habían sido tratados con terapia de privación de andrógenos durante seis meses. Concretamente fueron cincuenta los pacientes participantes que además tuvieron que realizar diversos cuestionarios de actividad física y pruebas neuropsicológicas estándar. Para hallar resultados se utilizaron las correlaciones de Pearson y regresiones lineales con la finalidad de crear asociaciones entre ejercicio y rendimiento cognitivo.
Como conclusión de la investigación una mayor práctica de ejercicio se relaciono con un mejor funcionamiento en diversas facetas cognitivas en hombres con cáncer de próstata que reciben terapia hormonal. De esta forma los expertos indican que recomendar deporte puede ser una intervención factible para limitar el deterioro cognitivo en estos pacientes mayores.
El ejercicio tuvo una correlación positiva y directa con los resultados en las pruebas de atención, memoria y función ejecutivas.
Desde ICUA siempre os animamos a practicar deporte con la finalidad de prevenir el cáncer de próstata así como otras enfermedades urológicas o cardiovasculares. Mantener un estilo de vida sano es la mejor forma de retrasar la aparición de ciertas enfermedades.
A continuación si deseas conocer más sobre estos estudios sobre cáncer de próstata y deporte, puedes hacerlo en los siguientes enlaces:
artículo actividad fisica y metástasis
artículo actividad física, terapia de privación de andrógenos y deterioro cognitivo