Un estudio realizado por la Universidad de California y presentado en días pasados en el Congreso de la Asociación Europea de Urología, ha mostrado como el tratamiento de suplementación con testosterona es eficaz para reducir la reactivación del cáncer tras la prostatectomía radical en pacientes con cáncer de próstata de bajo riesgo.
El estudio fue realizado con 834 pacientes sometidos a prostatectomía radical. De ellos 152 fueron tratados con testosterona. El cáncer recurrió tan solo en el cinco por ciento de los tratados mientras que recurrió en el 15% de los no tratados.
En la investigación se pudo comprobar que, tras una media de 3,1 años desde el momento de la cirugía, el cáncer había recurrido tres veces menos en aquellos participantes que habían recibido terapia sustitutiva hormonal.
La privación de testosterona, mediante la castración química o quirúrgica, se ha estado empleando desde que en la década de los cuarenta el premio nobel de medicina fuera ganado por una investigación sobre la aplicabilidad general del tratamiento de deprivación hormonal en el cáncer de próstata. Desde entonces la castración ha sido una opción de tratamiento para muchos pacientes. Ya en los años noventa y a principios del 2000 otras investigaciones dejaron de manifiesto que este tipo de tratamiento podía afectar al sistema cardiovascular de los pacientes, que podían morir – según las estadísticas- de forma prematura por este motivo y no como consecuencia del cáncer prostático.
La interacción de la testosterona con el cáncer de próstata es compleja y no se comprende totalmente hasta la fecha. Este estudio es una muestra de cómo su falta puede beneficiar a determinados pacientes, y su suplementación puede ser beneficiosa para otros. Aun así, hacen falta más estudios para aplicar los resultados de éste a la práctica clínica.
Si deseas conocer el artículo publicado en el Congreso, puedes hacerlo mediante el siguiente link:
https://eaucongress.uroweb.org/testosterone-slows-prostate-cancer-recurrence-in-low-risk-patients/
Equipo ICUA